Alcalde Carlos Pinedo sigue destituyendo docentes a causa de supuestos favores políticos
Los padres de familia del megacolegio de Ciudad Equidad protestaron ante lo que catalogaron violación de los derechos, tanto de sus hijos, como de los educadores que despidieron sin justa causa.
Niños de segundo grado del colegio Pedagógico de la Costa, en Ciudad Equidad, en compañía de sus padres de familia, protestaron ante el despido arbitrario de varios de los profesores del citado plantel educativo del Distrito de Santa Marta.
En total fueron tres los docentes despedidos, a quienes ni siquiera, les notificaron personalmente de su retiro. “Al rector le notificaron el cinco de febrero, sin embargo, él nos comentó pasados 20 días, quiere decir que laboramos casi un mes sin saber que nos iban a despedir sin justa causa”, expresó uno de los licenciados.
Este proceder, que fue reprochado y calificado por los manifestantes como presuntos favores políticos por parte del alcalde en turno, Carlos Pinedo Cuello, mantiene perjudicados a los estudiantes, toda vez que llevan varios días sin recibir sus clases.
“Nos reunimos para hacer esa marcha pacífica para exponer nuestra preocupación porque nuestros hijos siguen sin clase por falta de docentes de planta. En nuestro caso, el profesor Davinson Trout, era quien ya no los habían presentado en la Asamblea de padres de familia y de un momento a otro al profesor le notificaron telefónicamente que estaba destituido del colegio. Esto nos tomó por sorpresa porque al día siguiente no había clase”, expresó una de las madres de los estudiantes.
También, agregaron que, “procedimos al llamado de la Secretaría de Educación porque se nos está violando los derechos, tanto de los menores, como de los mismos profesores y no es justo que por temas políticos paguen personas inocentes”, puntualizaron.
Mientras tanto, los niños de varios cursos del plantel educativo no están recibiendo sus clases. La exigencia que mantienen los padres de familia, es que se les respete el derecho al trabajo de los educadores.
“Que los evalúen, que nos pregunten a nosotros o a los mismos estudiantes que tal les parece sus profesores. Ellos son excepcionales, nosotros nos sentimos a gusto con su método de trabajo y plan de estudio que imparten con nuestros pequeños. Aquí los de segundo grado están llorando al profe Davinson porque sinceramente es buenisimo, quiere a estos estudiantes como si fuera sus hijos. ¡Exigimos que no los dejen!”, dijo una madre de familia.